Observar a la competencia es necesario para aprender y crecer en cualquier aspecto profesional. La necesidad de un cambio de imagen de la Escuela de Práctica Jurídica era fundamental. La escuela estaba dando un giro radical en su plan académico. Un sistema más moderno se estaba instaurando y por lo tanto sus espacios debían hablar el mismo lenguaje. Transmitir coherencia es el principal objetivo en todo proyecto. Establecer unos valores y respetarlos, nos asegura un público más satisfecho.
Este lavado de cara ha tenido lugar en 3 fases distintas. En ellas nos hemos enfrentado a la actualización de aulas, despachos, biblioteca, salón de actos, sala de profesores, sala de alumnos, y por su puesto hall principal y descansillos.
No se han realizado obras mayores. Simplemente pintura, cambio de suelo, renovación de mobiliario para hacerlo más operativo, estudio de iluminación y acústica (puesto que teníamos espacios muy altos y grandes) y decoración.
Para mantener el carácter del edifico algunas piezas antiguas se han mantenido dándoles una nueva imagen. Ciertas butacas se han retapizado y algunos muebles pintado.
Hemos elegido un tono azul grisáceo para hall y distribuidores. Esto junto con el suelo en color nogal y la nueva iluminación y decoración llena de contraste y personalidad los espacios.
En las aulas se ha optado por un estilo más funcional con muebles versátiles que permiten varias distribuciones y usos.
El salón de actos era un espacio lleno de carácter con un diseño de techos muy interesante y materiales originales. Por ello se ha optado por actualizar tapicerías y dar más importancia a los elementos que consideramos más importantes.
fotos: Arístides Gomez